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EL ALZHEIMER Y EL APOYO PSIOLÓGICO

EL ALZHEIMER Y EL APOYO PSIOLÓGICO

“El ayer no es más que el recuerdo de hoy,
y el mañana es el sueño de hoy”
-Khalil Gibran

El Alzheimer es una enfermedad progresiva y degenerativa del cerebro que provoca deterioro de la memoria, pensamiento y la conducta. En México más de 350 mil personas están afectadas por esta enfermedad, y se estima que aproximadamente un tercio de los mayores de 85 años podrían tenerla. 

 El Alzheimer va más allá de una definición o cifra, pues quien es afectado por esta enfermedad vive en una enajenación, es decir, se sienten desubicados aún en su propio hogar, sienten ira, rabia, vergüenza, miedo a ver la niebla en qué se están hundiendo y que cada día es más densa. Alguien que padece de Alzheimer se pierde por completo, sus momentos de lucidez solo lo llevan a una gran tristeza y desesperación al entender su realidad. 

Es por esto que debemos darles importancia a los sentimientos de las personas afectadas con Alzheimer y acompañarlos para hacerlos “sentir en casa”. Aquí radica la importancia del apoyo de los familiares y/o cuidadores pues a través de la contención, el cariño y la conexión familiar se puede hacer sentir a quién padece esta enfermedad, que su entorno cercano sigue estable, que lo aprecian y puede sentirse seguro. 

¿Cómo puedo ayudar a alguien a “regresar a casa”?

  •  Coloca las etiquetas necesarias con nombres e instrucciones en aquellos objetos cotidianos cuyo método de uso pueda olvidarse. El microondas y el mando de la tele son solo algunos ejemplos. 
  •  Establece lugares fijos para aquellos objetos que el mayor usa más habitualmente, como pueden ser las gafas, el mando de la tele, etc. 
  • Coloca  barandillas en los lugares clave, como el dormitorio o el baño. En caso de pérdida de equilibrio, se podrá agarrar a ellas. 
  • Despeja el suelo de las diferentes habitaciones con cables y otros obstáculos que puedan inducir la caída del mayor.
  •  Sustituye las alfombras normales por antideslizantes. Aunque lo mejor es quitarlas por completo. 

Si bien, es importante velar por los sentimientos de las personas afectadas por esta enfermedad, también debemos dar apoyo a sus familiares. Quienes han estado a su alrededor vivirán el duelo de perder a esa persona lentamente en sus facultades, acompañarla implicará mucha paciencia, perseverancia, compromiso, constancia y empatía. Es por esto que el apoyo a los familiares es muy importante, de preferencia se debería llevar de manera profesional. 

Entonces, ¿cómo puedo mejorar la calidad de vida de ambos? Dar un solo consejo resulta complicado pues cada familia experimenta de forma diferente las emociones, siente con distinta intensidad y vive contextos muy diferentes. Sin embargo, N A I H A (una red de apoyo para cuidades y familias) recomienda las siguientes acciones: 

  • Mantener una rutina 
  • Tratarlos con tranquilidad y respeto
  • Buscar el equilibrio entre ayuda y autonomía: pensar en cosas que sí pueden hacer
  • Evitar entornos desconocidos
  • Salir a la calle y hacer actividades para consumir energía 
  • Encontrar el origen de la anguistia e irritabilidad para ayudarles a confrontar dichas situaciones 
  • Evitar aglomeraciones y limitar la cantidad de sonido/movimiento
  • Hablar con ellos sobre las razones por las que sienten miedo para buscar opciones
  • Controlar la toma de decisiones para evitarles la ansiedad 
  • Cuidarse como cuidador para que su familiar se sienta mejor, no está mal pedir ayuda. 

Desde 1994 la OMS (Organización Mundial de la Salud) y la Federación Internacional de Alzheimer establecieron el 21 de septiembre como Día Mundial del Alzheimer con el fin de difundir información sobre esta enfermedad y generar mayor conciencia sobre la misma. 

El Alzheimer borra la memoria, no los sentimientos